A veces es complicado entrar en casa y debemos esperar unos minutos para que se calme y esa emoción inicial se le pase. Es ahí cuando a ti el estado de ánimo te cambia, te sientes también feliz de verle y se te pasan todos los males.
Ese ritual de saludo es esencial para nuestros perros porque además de mostrarnos afecto, mediante los lametones y olisqueos quieren saber donde hemos estado, lo que hemos comido y así reconocen más cosas de nosotros.
Es importante responder a su saludo, dejar que se relajen y seguir con nuestro comportamiento normal tras ese primer instante. Son varios factores los que hacen que se comporten así:
Índice
Los estímulos
Tu y el resto de miembros del núcleo familiar sois los que a diario hacéis todas las tareas con él: darle de comer, salir a pasear, jugar, darle recompensas… y por lo tanto esa unión que tenéis es la que hace que él pueda hacer todas las actividades que a diario le estimulan.
Cuando nos vamos de casa y les dejamos solos, no tienen ningún estímulo humano y solamente pueden jugar solos o estar durmiendo por lo que, en el momento en el que nos vuelven a ver, se activan porque saben que volverán a estar acompañados.
Vínculo con su amo
Los perros nos perciben como otra especie y saben que somos diferentes a ellos pero a pesar de todo ello, se sienten unidos a nosotros y sobre todo, a sus amos ya que los consideran su familia.
En el libro How Dogs Love Us, el neurólogo Gregory Berns nos cuenta los resultados de las pruebas realizadas a diferentes perros con escáneres de resonancia magnética para medir sus reacciones ante estímulos con humanos y con sus dueños.
Mediante olores, pudo comprobar que distinguen a la perfección a los miembros de su familia y que los estímulos en su cerebro eran similares a los que tienen cuando reciben otras recompensas, pero que se quedan almacenados en una parte diferente de su cerebro.
Los perros prefieren buscar ayuda en sus humanos antes que en algún otro perro, sabiendo que tenemos más recursos para poder ayudarles.
El apego puede llegar a ser trastorno
No todos los perros lo desarrollan pero muchos sufren el trastorno conocido como «ansiedad por separación» cuando se les deja mucho tiempo solos en casa. Tienen miedo de haber sido abandonados, nos echan de menos y por eso, cuando volvemos, se emocionan tanto al ver que vuelven a estar junto a nosotros.
Cuando tienen este trastorno lo normal es que lloren o ladren cuando te vas, destruyan cosas de la casa, orinen o defequen en cualquier sitio porque no controlan sus emociones y para llamar nuestra atención.
Los perros que sufren este trastorno se emocionan mucho más cuando nos reciben pero no es bueno para ellos. Es bueno identificarlo para poder pedir ayuda a nuestro veterinario o a un adiestrador e intentar corregirlo.
No tienen noción del tiempo
Además debemos saber que seguramente reaccionen con la misma intensidad cuando nos vean aunque haya pasado poco tiempo sin vernos. Da igual si ha sido una hora como si hemos estado fuera dos días, nuestra mascota peluda nos querrá recibir con mucha intensidad ya que no consiguen distinguir los intervalos de tiempo.
Tu perro sabe quien eres y un solo instante lejos de ti puede parecerle una inmensidad. Además, como traerás olores nuevos del exterior, querrá conocerlos y acercarse a tí.
Para la higiene
Para entretener
Última actualización el 2023-08-20 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados
